Diana Urán, sinónimo de imparcialidad

Por Santiago Mejía

Diana Marcela Urán, jueza antioqueña de clavados, admitió que su vida tomó un cambio drástico desde que está ejerciendo sus labores arbitrales, y que sus vínculos afectivos con la delegación de Antioquia son nulos a la hora de juzgar una competencia.

Sin duda, Diana es uno de los personajes más queridos en la modalidad de clavados en Antioquia, mientras se le hacia esta entrevista fue interrumpida por muchas personas que la demandaban para algo en el Campeonato Nacional de Clavados que se disputa en Medellín, o simplemente la querían saludar con un abrazo.

La jueza nacional se retiró a los 16 años de su amor infantil y juvenil, la modalidad de clavados, ruptura que se dio por dos factores, el primero, su deseo por incursionar en otras facetas de la natación, y el segundo, enfocarse en su carrera profesional: es ingeniera agropecuaria, profesión que nunca ejerció.

“Disfruto más ser juez que clavadista, esta responsabilidad me hace mejor persona. Este rol te hace ver todos los esfuerzos de los nadadores, pasar de ser juzgada a juzgar me parece muy interesante. En competencias no tengo amigos, las risas las dejo después de los resultados deportivos”, añadió la hermana de Juan Guillermo Urán, uno de los clavadistas más importantes que ha tenido el país, y que ahora es entrenador de la Selección de Antioquia.

El juzgamiento no es la única faceta que ha tenido Diana, por sus venas también corre el amor de la pedagogía, y ver a los deportistas progresar deportivamente es uno de sus principales objetivos. Bajo su acompañamiento, estos deportistas mejoraron drásticamente su potencial: María José Palacín, Sara Gaviria, Karolay Álvarez, Simón Ríos, Derek Fernández, Juan Manuel Patiño, entre otros.

“Para ser juez, instructor o nadador tienes que dar lo mejor de vos, espero que todo el que desee unirse a este maravilloso espacio de lo mejor de sí para que sigamos creciendo. Siempre tendré los brazos abierto para capacitar al que lo necesite”, dijo para finalizar Diana Marcela, referente de los clavados del país y quien siempre se caracteriza por su silencio y su alegría en todo momento.